El clima de Pumanque es Templado Mediterráneo, con lluvias y frío invernales, y veranos templados y secos.

Debido a las bajas temperaturas del Océano Pacífico en la costa de Colchagua, producidas por la fría corriente de Humboldt, se generan brisas  que refrescan los viñedos permitiendo una lenta maduración, que da origen a vinos de mayor intensidad frutal, muy frescos y de buena acidez.

La gran amplitud térmica entre el día y la noche de 20°C permite a las uvas lograr una gran acumulación de polifenoles, responsables del alto color y estructura de nuestros vinos. La temperatura máxima promedio en verano es de 29°C y la mínima promedio es de 9°C. La precipitación anual alcanza los 450 mm.

Para nosotros es fundamental que la armonía que expresan nuestros vinos, sea el reflejo de la interacción respetuosa y equilibrada entre las múltiples formas de vida que coexisten en el viñedo. Comprometernos con la sustentabilidad del viñedo, es comprometernos con la existencia de los animales, plantas y  microorganismos que habitan en la propiedad.

El trabajo en el viñedo busca potenciar las características únicas que este posee, logrando vinos que expresen al máximo su carácter.

-Agua: Se riega durante la temporada de primavera-verano con  sistema de riego por goteo, usando  agua de acuíferos subterráneos y de un tranque de acumulación de lluvias de invierno.

Se realizan riegos de larga duración y de poca frecuencia, para lograr humedad en profundidad y de esta manera, que las raíces tengan un crecimiento descendente en busca del agua. Esto permite una óptima absorción de nutrientes, favoreciendo la longevidad de las plantas y calidad de la uva.

-Trabajo de Caracterización y Diferenciación de suelos:

Realizamos un estudio de diferenciación de suelos mediante mediciones de conductividad electromagnética (CEM), complementado con calicatas hechas en cada uno de los sectores diferenciados por dicha medición. Este estudio se refleja en un mapa que nos muestra los distintos tipos de suelo a través de colores diferentes. Colores rojos y amarillos indican suelos con mayor cantidad de piedras y/o mayor compactación, estos dan origen a vinos de mayor estructura, con taninos más presentes. Los colores verdes y azules, muestran menor cantidad de piedras y suelos más sueltos que permiten mayor penetración de raíces. Estos dan origen a vinos más lineales, de taninos más suaves y elegantes.  A través de vinificaciones de pequeños lotes provenientes de cada uno de estos sectores distintos, pudimos obtener vinos con características diferentes, lo que nos ha permitido seleccionar lo mejor de este viñedo y  mejorar año a año la calidad de nuestros vinos.